Por Nancy Cepero
¡¡¡Se pasan!!!
No quiero entregarme ante las manos largas del terror.
Pero casi siento que me alcanzan. Temo x mi, x mis amigxs, y x toda la gente que es como mis amigos y como yo.
Se cumple su objetivo; la violencia, la crueldad y la impunidad dan abrigo a todo el que se endiosa y cree que puede caminar x sobre los demás. Su diana de odio, de ignorancia, de frustración e irrespeto es tan amplia que cabemos todxs. Todxs podemos estar mañana en Pulse o en cualquier otro lugar donde alcancen los dardos del fanatismo y la maldad. ¿Y qué hacemos al respecto? ¿Cómo extirpar de raíz este cáncer de terrorismo y criminalidad que nos acecha como depredadores insaciables y poderosos? ¿Cómo eliminar de nuestras calles, de nuestras ciudades, de nuestros países y de nuestras vidas a esta basura que intenta aplastarnos como los humanos diversos que somos, de pluralidad racial, religiosa, sexual y espiritual? No pueden eliminar nuestra comunidad. El terror que siembran no nos va a anular. Orlando puede ser cualquier lugar, gente. No pueden avanzar más. Tienen que parar.